Los analistas siguen absortos intentando rastrear la flota de petroleros iraní, y existen puntos de vista divergentes sobre la cantidad de crudo que se escurre secretamente hacia los mercados mundiales. Esto se debe a que la mayoría de los buques tanque se han "ensombrecido" al desconectar los instrumentos que revelan su ubicación. Esto desde que EE. UU. endureció las sanciones a Irán este año, según informa Bloomberg.

"Irán es una caja negra", no obstante, hay formas de descubrir estas actividades secretas, dijo Devin Geoghegan, director mundial de inteligencia petrolera de Genscape Inc. en Denver, Colorado, Estados Unidos. "Irán simplemente está haciendo un mejor trabajo al poner su petróleo en manos de otras personas (…) de lo que todos esperaban", añadió.

Después de romper un acuerdo anterior sobre el programa nuclear de Irán, el presidente estadounidense Donald Trump está presionando al comercio internacional para que Teherán acepte un nuevo acuerdo. El enfrentamiento ha desencadenado una serie de hostilidades, desde el ataque a petroleros saudíes hasta el derribo de un drone espía estadounidense. También ha cautivado a los operadores de crudo, ávidos de información que podría influir en los precios mundiales.

Mientras que el Departamento de Estado de Estados Unidos pretende reducir las exportaciones de Irán a "cero", el ministro iraní de Petróleo, Bijan Zanganeh, ha insistido en que su país está trabajando "día y noche" para mantener las ventas en marcha, y tiene una serie de opciones clandestinas que lo permiten.

En donde si hay un punto en el que las compañías que monitorean a Irán están de acuerdo, es que Estados Unidos aún no ha logrado que el petróleo iraní deje de fluir. Sin embargo, los analistas difieren en cuanto a la cantidad. Las exportaciones diarias podrían ser de tan sólo un par de cientos de miles de barriles, o superar el millón de barriles diarios enviados durante las sanciones anteriores bajo el predecesor de Trump, Barack Obama.

¿Números inflados?

"Irán es tan reservado ahora como en cualquier otro momento de los últimos 40 años", aseguró Daniel Gerber, director ejecutivo de la empresa de tracking de petroleros Petro-Logistics SA, con sede en Ginebra. "Hay una amplia gama de estimaciones divergentes de sus exportaciones en la industria, con una serie de problemas de contabilidad que causan cifras erróneas más altas en algunos casos"

Irán apenas está enviando un tercio de la cantidad que vendió durante la anterior ronda de sanciones impuestas a principios de esta década, dijo Gerber. Algunas otras estimaciones se han inflado porque incluyen todo el petróleo que se ha embarcado en los buques tanque o que se ha almacenado en el país, en lugar de sólo lo que se ha enviado al extranjero, dijo.

"La administración Trump ha tenido éxito en la reducción de las exportaciones de Irán a una escala sin precedentes", según Gerber.

Kpler, una empresa de análisis basada en París, cruza información incorporando datos aduaneros e informes de agencias portuarias. Según sus estimaciones, Irán ha logrado mantener flujos limitados hacia China, su mayor cliente, y algunos hacia Turquía y Siria. El petrolero “Adrian Darya 1”, el foco de atención mundial cuando fue capturado cerca de Gibraltar por el ejército del Reino Unido a principios de julio, marcó recientemente una posición cerca de la costa de Siria, pero desde entonces ha desaparecido del seguimiento por satélite.

Irán está empleando una serie de técnicas para tratar de evitar la detección, incluyendo "varias transferencias de buque a buques fuera del radar", según el analista de Kpler, Samah Ahmed.

Presión de triunfo

Sin embargo, las exportaciones se han ahogado en gran medida, cayendo un 90% desde que Trump abandonó el pacto nuclear en mayo de 2018 a sólo 400.000 barriles al día, afirma Kpler.

"El objetivo de reducir las exportaciones de Irán a cero nunca se alcanzó", dijo Homayoun Falakshahi, analista de la firma. Sin embargo, "la administración Trump ha sido obviamente muy exitosa en traer la máxima presión."

El volumen real de crudo que Irán vende efectivamente, es probablemente aún menor, según Sara Vakhshouri, directora de la consultora SVB Energy International en Washington, D.C. Algunos cargamentos se venden para pagar deudas con China, y otros se trasladan a los llamados depósitos aduaneros sin pasar por la aduana, lo que significa que siguen siendo propiedad de Irán. Como resultado, las ventas totales en julio podrían haber sido de tan sólo 100.000 barriles diarios, dijo.

Por el contrario, el Geoghegan de Genscape detecta "una cantidad sustancial producción superior" al observado por otros análisis.

En lugar de utilizar imágenes satelitales del movimiento de petroleros, utiliza fotografías satelitales de la quema de gas en los yacimientos petrolíferos para medir el nivel de actividad y calcular la producción. Irán continúa perforando "a toda máquina" en nuevos campos en la región de Karún Occidental, según Geoghegan.

Genscape estima que la producción combinada de crudo y condensado sólo ha caído en un 15% desde el primer trimestre de 2018, y actualmente puede llegar a los 3,9 millones de barriles diarios, con exportaciones de entre 500.000 y 1 millón diarios. Esa producción extra no necesariamente se está vendiendo, y parece que se está almacenando tanto en tierra -incluyendo instalaciones subterráneas que no son tan reconocibles- como en el mar.

En consecuencia, la sorprendente resistencia de la industria petrolera iraní puede no durar mucho más tiempo. A medida que el almacenamiento se va llenando, es posible que sea necesario reducir la producción.

"Hemos visto cada barril que han llenado, y hemos visto llenarse de petróleo áreas que no han usado históricamente", dijo Geoghegan. "Van a chocar con una pared de ladrillos en algún momento”, pronosticó.

Por MundoMarítimo