“Día tras día, mes tras mes, año tras año, Alberto Alemán Zubieta derribó para siempre aquel viejo mito sobre la incapacidad de los panameños para administrar y operar una empresa de proyección mundial”.

Así describió el presidente de la Cámara Marítima de Panamá (CMP), Willis Delvalle, los 16 años que ejerció Alemán Zubieta como administrador del Canal, durante un homenaje que le rindió el gremio el pasado jueves.

“Alemán Zubieta, un profesional orgullosamente panameño que ha puesto el nombre de Panamá en letras de molde en la comunidad marítima mundial, al dirigir de manera ejemplar el Canal de Panamá por 16 años”, expuso Delvalle, en el evento, que organizó la CMP.

El trabajo como administrador de la Autoridad del Canal de Panamá ha llevado a esta entidad a ser “una de las empresas más exitosas de la industria marítima mundial”, destacó.

Alemán Zubieta comenzó su vinculación con la administración del Canal en 1995. Ese año, el entonces miembro de la junta directiva de la Comisión del Canal, Emanuel González Revilla, lo invitó a su despacho para comentarle que la directiva había aprobado una propuesta para que se hiciera una auditoría para asegurarse de que Estados Unidos transfiriera a Panamá un Canal en óptimas condiciones de operación, conforme lo estipulaba el tratado de 1977.

Delvalle contó a los presentes que González Revilla le pidió a Alemán Zubieta revisar el documento, el cual había sido elaborado por ejecutivos norteamericanos del Canal, a lo que accedió gustosamente.

Después de verificar la información, Alemán Zubieta le envió sus observaciones a González Revilla, quien le pidió que viajara a Washington, D.C., para reunirse con el entonces subsecretario del ejército Joe Reeder.

La directiva del cuerpo de ingenieros estadounidense aceptó un equipo panameño de ingenieros -al que se llamó el Blue Ribbon Engineering Committee (BREC), presidido por Alemán Zubieta e integrado por Roberto Roy, Moisés Castillo – ya fallecido --, Alberto Palacios y Ernesto Ng.

Pero surgió un nuevo reto. Ejecutivos norteamericanos alegaban que el reglamento prohibía a la Comisión del Canal recibir servicios a título gratuito.

Según dijo, el impasse fue superado cuando el grupo panameño propuso ofrecer sus servicios bajo el esquema pro bono, es decir, para el beneficio público. “Un gesto patriótico que debería ser incluido en los anales de la historia nacional”, dijo.

El trabajo del grupo de ingenieros panameños estimuló al entonces presidente de la República, Ernesto Pérez Balladares, para proponer en 1996 a Alemán Zubieta como administrador del Canal. Logró el respaldo irrestricto de Joe Reeder, que a la postre había sido designado presidente de la junta directiva del Canal.

En el recuento, el presidente de la CMP mencionó que en su testimonio para el libro Historias Canaleras, de Ana Elena Porras, Alemán Zubieta reconoció que “Joe Reeder fue, sin duda, un motor y líder importantísimo de la transición y transferencia del Canal a la República de Panamá”.

Desde 1996 hasta 1999 se desempeñó como administrador de la entonces Comisión del Canal de Panamá, agencia federal del Gobierno de Estados Unidos, responsable por la administración y operación de la vía hasta el 31 de diciembre de 1999. En 1998 fue nombrado administrador de la ACP por un período de siete años, que venció en 2005. Ese mismo año, la junta directiva lo reeligió para seguir al frente del Canal por siete años más, que vencen el 3 de septiembre de 2012.

Ya en abril de 1999, el 88% de las posiciones gerenciales eran ocupadas por panameños. En 1979, la fuerza de prácticos del Canal solo tenía 2 panameños de los 220. Para fines de siglo, el 86% estaba ocupada por panameños.

Ricaurte Catín Vásquez fue otro de los panameños que se incorporó al equipo al ser nombrado director de Finanzas, en reemplazó de Norbert Kraegel.

Implantar en el Canal un modelo de negocio rentable y competitivo, inspirado en la visión de convertir a Panamá en líder mundial en servicios a la industria marítima y en el desarrollo sostenible para la conservación de la cuenca del Canal, fue otro de los puntos destacado por Delvalle como una de las metas trazadas por Alemán Zubieta.

Este nuevo modelo involucró un cambio en la política tarifaria de la ruta panameña. “Cuando hablamos sobre tema tan sensitivo para los usuarios, debemos reconocer que la administración de Alemán Zubieta ha sido amplia en consultar a la industria marítima en cada ocasión en que se han propuesto aumentos”, dijo.

En varias ocasiones, la administración ha atendido la recomendación de los usuarios, como la de posponer por algunos meses el incremento de peajes.

El modelo de gestión impulsado por la administración de la ACP le ha rendido beneficios económicos al país. En 12 años de administración panameña, el Estado ha recibido más de $6 mil 576 millones en beneficios directos, 3.6 veces más ingresos que los $1,833 millones recibidos en 85 años bajo administración estadounidense.

Después de varios años al frente del Canal, Alemán Zubieta y su equipo gerencial acometieron un nuevo desafío: la ampliación de la vía. La propuesta se sustentó en más de 150 estudios financiados por la ACP, que abarcaron desde las alternativas y su viabilidad técnica y financiera, hasta el impacto ambiental y la demanda futura.

La propuesta fue sustentada ante la junta directiva de la ACP, la cual la avaló. Luego de aprobada por el Consejo de Gabinete, el 22 de octubre de 2006 el pueblo panameño mediante referéndum aprobó, por mayoría, la ampliación del Canal, obra que una vez terminada a fines de 2014 duplicará la capacidad de la ruta, de 300 millones de toneladas anuales a más de 600 millones de toneladas.

La dirección del gremio resaltó los honores recibidos por Alberto Alemán Zubieta de parte de la comunidad marítima mundial, gracias al respaldo que siempre tuvo de los hombres y mujeres que laboran en la ACP, que junto a él, “han asumido el compromiso de dar lo mejor de sí para el Canal y para Panamá”.

Fuente: Diario Prensa de Ciudad de Panamá