Seis años de progreso y desarrollo, quizás el mejor período que le ha tocado vivir al puerto de San Antonio, están de manera simbólica llegando a su fin. Mañana Fernando Crisóstomo Burgos deja su cargo de gerente general de la Empresa Portuaria de San Antonio.

En su gestión, destacan muchos hitos trascendentales, entre ellos la incorporación de concesiones privadas a la gestión portuaria (STI y Panul), lograr los diez millones de toneladas en transferencia de carga y ser el primer puerto de la costa oeste Sudamericana en transferencia de contenedores. Además, en las relaciones con la ciudad, se construyó la primera etapa del Bellamar y pronto comenzará la segunda, más una serie de proyectos en carpeta.

Las proyecciones del puerto son infinitas, pero un ciclo se cierra con la partida de Fernando de San Antonio, quien deja su cargo sólo con cifras azules y una gestión calificada como sobresaliente por las empresas del sector, lo que quedó ratificado en las muestras de reconocimiento que se le han brindado por empresas y ejecutivos portuarios, con algunos de los cuales incluso mantuvo diferencias.

Una de las virtudes de su gestión fue que logró incorporar vectores de la gestión empresarial privada en una empresa con una decidida cultura estatal, generando con su equipo de gerentes y trabajadores un innovador sello en el quehacer de la Epsa.

Los medios de comunicación, es el momento, también debemos agradecer a Fernando Crisóstomo por la política de puertas abiertas que estableció y el respeto y apoyo que siempre mostró por el trabajo del periodismo local.

Como siempre, sonriente y llano, da su última entrevista en la oficina de Alan Macowan, la misma donde nos recibió en abril de 1998 a poco de asumir su cargo.

P.- ¿Cuál es el balance final de su gestión en la gerencia general de la Empresa Portuaria de San Antonio, a horas dejar su cargo?
R.- Creo que los más importante de estos seis años es que hemos modernizado el puerto: lo cambiamos positivamente. Era un puerto del tercer mundo y lo dejamos en uno tan eficiente como los del primer mundo. El cambio ha sido asombroso porque en todos los ámbitos y áreas las transformaciones han sido positivas: en seguridad, operaciones portuarias, en la gestión: todo ha sido un éxito. Se ha progresado y los cambios son evidentes, a ojo de las personas que conocieron el puerto hace seis años. Se han creado nuevas áreas y otras se han remodelado. El futuro es muy positivo y San Antonio está llamado a ser el puerto del siglo 21 para Chile Central.

P.- Con el proceso de concesiones se cambió el esquema portuario. ¿Cómo ve la gestión de las empresas que concesionaron?
R.- En mi gestión hubo dos períodos. Uno entre el año 1998 y el 2000 en el cual se administró una empresa portuaria de acuerdo al esquema multioperador. Luego viene el segundo período a contar del año 2000, en el que se incorporan los concesionarios. El primer período correspondió a ordenar, modernizar las operaciones y solucionar problemas complejos de lo que era la operación portuaria como el tráfico, seguridad y mejorar el servicio portuario optimizándolo, estandarizándolo y homogeneizándolo. También fue muy importante generar una nueva disposición hacia los clientes, entre otras cosas. La segunda gestión apuntó a cumplir lo que indicaba la ley de modernización de los puertos que era entregar la operación y desarrollo a los privados para evitar que el Estado siguiera invirtiendo dinero y captar recursos. Eso se hizo bien, tuvimos la suerte de captar los dos mejores concesionarios como son la Compañía Sudamericana de Vapores el consorcio Panul. Tuvimos suerte y los concesionarios tuvieron visión de invertir en este puerto.

P.- ¿Cuál es a su juicio el próximo paso a seguir?
R.- Los desafíos que vienen son interesantes, quizás no tan novedosos. El puerto tiene que adecuarse al mercado naviero de buques mayores y por lo tanto tiene que apoyar los proyectos de inversión de STI para recibir naves de mayor calado y eslora, adecuar áreas comunes y después más adelante, el otro desafío importante es modernizar la terminal espigón.

Sistema Portuario

P.- ¿Cuál fue el momento más difícil de su gestión?
R.- Yo diría que el momento más complejo fue cuando tuvimos una diferencia de interpretación y de criterios con STI. Ese momento fue superado convenientemente y se llegó a un acuerdo en el que ambas partes quedamos satisfechas y con ganas de seguir invirtiendo y progresando. Ese fue el momento más difícil de mi gestión, pero lo bueno vino después cuando superamos las diferencias y conformamos lo que se llamó el Sistema Portuario de San Antonio, donde todos trabajamos para que el puerto siga creciendo. Está demostrado que el acuerdo fue por el bien de todos porque hemos seguido desarrollándonos como puerto.

P.- ¿Por qué deja el puerto en un momento peak, cuando está posicionado a nivel continental como el primero de la costa Sudamericana en transferencia de contenedores?
R.- Creo que uno debe dejar los cargos cuando está en los momentos cúlmines. Siento que ya cumplí una labor para la cual yo vine e incluso estuve más tiempo, más de lo necesario. Llegamos a un momento tal que el puerto se consolidó plenamente. Al momento, cuando pedí al directorio dejar el cargo, fue justo cuando se cumplieron diez millones de toneladas. Llegué con 6,6 millones y me voy con diez millones; dejo un puerto desarrollado y posicionado. También es importante destacar que hicimos una gran labor de difusión y somos la tercera empresa que entrega aportes al Estado. Son logros importantes. La labor de comunicación y contactos con el mercado naviero también ha sido muy relevante. Además posicionamos la marca, dimos a conocer los logros y destacamos las bondades del puerto, que es la forma que existe para que los clientes prefieran el puerto.

Directorio, Ciudad y Trabajadores

P.- Quiero preguntarle por sus relaciones con los trabajadores y el directorio de Epsa.
R.- Primero, con el directorio no me queda más que agradecer la disposición y comprensión que tuvieron hacia mi persona. Siempre existió una relación muy buena, especialmente con don José Manuel Morales Tallar que fue donde nos tocó vivir el período de mayor presión por hacer las cosas. Con los trabajadores, diría que establecimos un pacto social no escrito. Ellos entregaban su máximo esfuerzo y Epsa entregaba beneficios muy buenos en remuneraciones y estabilidad en sus empleos. Yo diría que esa fue la característica de mi gestión con los trabajadores. En general fueron buenas las relaciones y me llevo un grato recuerdo.

P.- Sus sentimientos al dejar el cargo
R.- Quiero a través de El Líder dar las gracias a los trabajadores, clientes, vecinos de San Antonio, autoridades y personas que me tocó conocer por todo el apoyo que me dieron y la ayuda que recibí. Cuando me seleccionaron en Emporchi me dieron a elegir entre Valparaíso y San Antonio pero elegí San Antonio porque es mi zona. Desde niño pasé los veranos en Cartagena y venía mucho a San Antonio, en cambio a Valparaíso no lo conocía. Siempre voy a estar cerca de San Antonio y su gente. Esta ciudad tiene un gran futuro y esto sólo está empezando. Me da la impresión que ahora el desarrollo debe venir desde el lado terrestre, estamos hablando del parque industrial y el desarrollo de la ciudad. Ahí está el gran desafío y los sanantoninos deben levantar un poco más la mirada, no estar tan pendiente de la discusión menor interna. Este es el desafío y cuando lo logren, San Antonio va a llegar ser lo que se merece.

P.- ¿Y cuál es el desafío de mañana para Fernando Crisóstomo cuando ya no esté en la Empresa Portuaria de San Antonio?
R.- Me voy a dedicar a actividades de mi familia. Mi otro deseo es incorporarme a una empresa del ámbito privado, pero mi paso por San Antonio me ha marcado con fuerza y es algo que me nutrió y engrandeció. Me voy agradecido por todo lo que me apoyaron y más que satisfecho con lo realizado.

Relación ciudad
 
Fernando Crisóstomo destaca que la relación con la ciudad ha sido muy exitosa. "Este es el único puerto que tiene una relación de cercanía con la ciudad. En otros puertos hay lejanía, discusiones. En San Antonio se hacen proyectos en conjunto. La remodelación del paseo Bellamar fue un hito que marcó el trabajo en conjunto. Fue algo que costó hacerlo, hubo que romper prejuicios para que los equipos de la Municipalidad y el Puerto trabajaran en conjunto, pero se logró a plenitud y los buenos resultados están a la vista".

Fuente: El Líder